El VIH es prevenible y tratable, en la actualidad, existen métodos altamente efectivos para reducir la transmisión del VIH y garantizar una vida saludable para quienes viven con él. A continuación, te presentamos cinco formas clave para prevenir la transmisión del VIH.
1. Uso del condón: la primera línea de defensa
Los condones son fundamentales para prevenir la transmisión del VIH, así como otras infecciones de transmisión sexual (ITS) y embarazos no deseados. Al utilizarlos correctamente, se reduce significativamente el riesgo de transmisión. Es esencial optar por lubricantes a base de agua o silicona, ya que estos son compatibles y seguros con el látex. Así se evita que el condón se rompa o pierda su efectividad durante el uso.
Consejo adicional: Asegúrate de llevar siempre condones contigo y revisa la fecha de caducidad antes de usarlos para garantizar su eficacia.
2. Diálogo abierto y pruebas de VIH en pareja
Tener un diálogo abierto con tu pareja sobre los antecedentes sexuales y la importancia de hacerse pruebas de VIH es una de las maneras más efectivas de protegerse mutuamente. Hablar sobre la salud sexual fortalece la confianza y permite tomar decisiones informadas que beneficien a ambas partes.
Además, realizarse pruebas regulares de VIH y otras ITS en conjunto contribuye a la prevención y asegura que ambes tomen las medidas necesarias para cuidarse mutuamente.
3. Tratamiento oportuno de infecciones de transmisión sexual (ITS)
El tratamiento de ITS es crucial, ya que estas infecciones pueden aumentar la probabilidad de transmisión del VIH si no se tratan a tiempo. Si tienes alguna duda sobre tu salud sexual, lo mejor es buscar atención médica inmediata. Muchas ITS no presentan síntomas evidentes, por lo que realizar chequeos regulares es esencial.
Recuerda: Si recibes un diagnóstico positivo para alguna ITS, sigue el tratamiento recomendado por tu médico y notifica a tus parejas para que también puedan tratarse.
4. PrEP y PEP: protección antes y después de la exposición al VIH
Dos métodos eficaces para prevenir la transmisión del VIH son la PrEP (profilaxis preexposición) y la PEP (profilaxis postexposición).
- PrEP: Es un medicamento que se toma de forma preventiva, antes de exponerse al VIH. Es ideal para personas que tienen un alto riesgo de adquirir el virus.
- PEP: Es un tratamiento de emergencia que se toma después de una posible exposición al VIH. Debe iniciarse dentro de las 72 horas posteriores al contacto para ser efectivo.
Estos tratamientos son seguros y, cuando se utilizan correctamente, son altamente eficaces para reducir el riesgo de transmisión.
5. Prevención de la transmisión vertical durante el embarazo
Las personas gestantes deben hacerse una prueba de VIH como parte de su control prenatal. Si se detecta un resultado positivo, el tratamiento antirretroviral reduce de manera significativa el riesgo de transmisión del VIH al bebé. Siguiendo un tratamiento adecuado y las recomendaciones médicas, es posible que el recién nacido no adquiera el virus.
Dato importante: El tratamiento temprano y el seguimiento médico son esenciales para asegurar la salud tanto de la persona gestante como del bebé.